El domingo pasado, más o menos a esta hora, me encontraba viendo a Nick Lowe en Avilés. Mis facultades físicas y mentales no reunían las mejores condiciones tras la noche del sábado anterior, pero tenía una entrada en mi poder que no pensaba desperdiciar. Al fin y al cabo se trataba de un show acústico, y nada malo podía pasar, excepto el riesgo de quedarme sobado en la butaca del Centro Cultural. La tentación estuvo ahí, lo reconozco, pero hubiera quedado un poco feo cerrar los ojos y ponerme a roncar en medio del Auditorio, teniendo como teníamos delante a todo un gentleman de la música británica. Un señor que, a sus sesenta y cuatro primaveras, merece cuando menos un respeto y, por supuesto, la admiración de aquellos que hayan seguido su extensa carrera artística.
Como una imagen vale más que mil palabras, hoy brevedad. Aquí debajo teneis varios videos que resumen perfectamente lo que vivimos. Nick Lowe en solitario, de pie, iluminado por un foco que centraba la atención en su figura. Sirviéndose de la guitarra acústica y su taza de té, dio muestras de una sencillez y naturalidad que cautivó a la mayoría de los presentes. Durante hora y cuarto delante de un público muy agradecido por lo general, logró arrancar muchos aplausos y alguna sonrisa, con ingeniosos comentarios en momentos puntuales de la actuación, y desgranando un setlist repleto de canciones maduras, aireadas de country/pop/rock. No cayó "Cracking Up", pero sí varias de su última grabación: "The Old Magic" (2011); junto con las versiones de Elvis Costello "Alison" y "Peace, Love & Understanding", más otros clásicos de su repertorio como "When I Write The Book" o la archiconocida "Cruel To Be Kind".
Como una imagen vale más que mil palabras, hoy brevedad. Aquí debajo teneis varios videos que resumen perfectamente lo que vivimos. Nick Lowe en solitario, de pie, iluminado por un foco que centraba la atención en su figura. Sirviéndose de la guitarra acústica y su taza de té, dio muestras de una sencillez y naturalidad que cautivó a la mayoría de los presentes. Durante hora y cuarto delante de un público muy agradecido por lo general, logró arrancar muchos aplausos y alguna sonrisa, con ingeniosos comentarios en momentos puntuales de la actuación, y desgranando un setlist repleto de canciones maduras, aireadas de country/pop/rock. No cayó "Cracking Up", pero sí varias de su última grabación: "The Old Magic" (2011); junto con las versiones de Elvis Costello "Alison" y "Peace, Love & Understanding", más otros clásicos de su repertorio como "When I Write The Book" o la archiconocida "Cruel To Be Kind".
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