Íntimo y desgarrador. Así es lo último de Nick Cave & The Bad Seeds, un trabajo marcado por la tragedia que le ocurrió al cantante cuando su hijo de 15 años, Arthur, falleció precipitándose por un acantilado el año pasado tras consumir LSD. Desgraciadamente nadie tiene un manual de instrucciones para recomponerse ante la pérdida de un ser querido, pero Nick Cave escribe el suyo propio a modo de terapia, o al menos lo intenta con este disco. "Skeleton Tree" es el testimonio de un hombre desesperado por superar su particular duelo y nosotros como oyentes participamos de ello compartiendo su dolor.
No es comparable a ningún otro trabajo de Nick Cave & The Bad Seeds y puede que no tenga la riqueza musical de obras previas. Difícil de valorar y de digerir porque estamos condicionados por un hecho trágico. Da la impresión de que toda la carga emocional contenida en el disco inclina la balanza hacia el "Sí", aprobando el lamento de un artista que desnuda su alma abriéndose en canal, lo cual despierta admiración y 'simpatía'.
Hay piezas donde se nota el pulso y la energia de los Bad Seeds, como en 'Anthrocene', pero de forma muy puntual. Con otras Nick Cave llega a erizarnos la piel (asombrosa y muy sentida 'I Need You'). El resto, en su mayoría, son canciones doloridas con una atmósfera sosegada y moderadamente melancólica, mutando de color como las hojas de los bosques en otoño. En efecto, un album de propiedades balsámicas para cualquier estación.
2 comentarios:
No estoy yo para entrarle mucho a este hombre ultimamente, la verdad, y no es porque no me gusten los discos oscuros o depresivos, no, es que ultimamente le he cogido un poco de manía, eso es todo...
Prefiero a Lanegan, Waits o Hyatt antes.
Es lo que tiene un artista como Nick Cave, podrá gustar más o menos pero no deja a nadie indiferente... Yo al que no trago es a Tom Waits, fíjate. Con Mark Lanegan coincidimos.
Saludos PUPILO.
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