
En cuanto al disco en sí me parece una jodida maravilla, y desde "Child In the Sunburst Pyramid", con esa intro progresiva e instrumental invita a recorrer pasajes espacio temporales que van recogiendo lo mejor del rock con todo tipo de influencias de décadas pasadas. Mucha psicodelia como ingrediente principal, en ocasiones bien acompañada de estampidas sónicas como "La Creatures D'amour" o "El Schizo" totalmente viscerales; y en otras como en "Galaxina" o "Her Planet Is Love" suenan más dulces, pero son como caramelos envenenados recubiertos de potencia y distorsión. El vocalista y guitarra Mykill Ziggy tiene un estilo muy particular de cantar, un poco marciano, moviendose entre el arrebato y la melodía me recuerda un poco a Perry Farrell pasado de ácido. No es que lo haya visto nunca en ese estado, pero de haber sucedido creo que la descripción puede ser bastante ilustrativa. Imaginaros por lo tanto un cruce entre Jane´s Addiction con The Beatles, guitarrazos heavys de por medio y una pizca de glam para dar más forma al asunto. Lo que tenemos es una colorida amalgama sonora de la madre que lo parió. Todo un coctel muy saludable y revitalizante listo para degustar a cualquier hora del dia, preferiblemente antes de salir de fiesta o para esos momentos en los que necesitas levantar el ánimo.
Sinceramente, veo mucho potencial en esta banda y creo que con un poco de suerte pueden dar el pelotazo en los próximos años. El tiempo dirá si se convertirán en otro grupo de culto o dan el salto a donde se merecen. Para mi una cosa está clara y es que no deben pasar desapercibidos. "Technicolor Mother" me entró como un tiro y se sigue quemando en mi reproductor igual que una bala perdida bajo el sol del desierto. Apasionante, imaginativo y muy recomendable.
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