AZKENA ROCK FESTIVAL 2011, Jueves 23

Vaya por delante que lo que vais a leer a continuación es una crónica del ARF muy personal y subjetiva. Quiero decir, que reportajes mejores, más amplios y mejor redactados encontrareis por la red, mismamente en los numerosos blogs amigos, donde ya he leído otros puntos de vista diferentes al mio pero igualmente válidos. De todas formas, como viene siendo costumbre en esta casa, es casi de obligación moral soltar unas líneas de todo concierto al que nos movemos, y durante este fin de semana pasado cayeron unos cuantos, así que sin más preámbulos, vamos allá.

Llegamos con tiempo suficiente al recinto para instalar la tienda de campaña y estar presentes a la hora de apertura de puertas. Monumental follón con que nos encontramos, ni medio normal, las cifras oficiales hablan de 18.456 personas para este dia. Hubo colas para todo, un aspecto a corregir y mejorar, para coger las pulseras, otra para las entradas de dia, otra para los que teníamos el bono, y una vez dentro más colas para la recogida del "Welcome Pack". El mio alguien se lo debió quedar porque sin DNI no lo entregaban, se me olvidó en casa así me quedé sin ese pedazo de regalo, tampoco me importó demasiado.

Sonaban Eels de fondo mientras saludaba algunos amigos que me iba encontrando por el camino, hasta que cogí un buen sitio para ver el primer grupo interesante de la tarde: Black Country Communion. El setlist fue corto pero muy acertado, me dio la impresión de que empezaron un poco acelerados puede que debido a la limitación de tiempo, con un Glenn Hugues manejando el cotarro de forma enérgica como el sabe, manteniendo la tensión, y bien de voz respaldado por un gran Bonamassa que tomó el relevo en "The Battle For Hadrian's Wall", y que como el resto de compañeros asume bien el papel de secundario en la banda. No entiendo los rajes que leo por algún medio sobre este guitarrista, ni tampoco me imagino a otro en su puesto que lo pueda hacer mejor, también existe un teclista llamado Derek Sheriniam, del que nadie se acuerda pero ahí está y no de adorno precisamente, además de Jason Bonham, (sí, sí, "el hijo de..."). A la postre fue el grupo que más me gustó de este dia, pese a que me supo a poco y la hora no era la más ideal. Cojonudo el final con "Man In The Middle" y "Burn".

Acto seguido tocaban The Cult, nunca los había visto y tenía ganas, pequeña decepción me llevé, en parte gracias a las payasadas de Ian Astbury. Muy pasota y desfasando, al contrario que el resto de compañeros que se portaron de forma muy profesional, Astbury se empeñó en cargarse el bolo con sus continuas chorradas, bromas que no venían a cuento entre canción y canción, convirtiendo aquello en algo más parecido al Club de la Comedia (sin gracia) que a un concierto de Rock. De su imagen mejor no menciono nada, porque si al menos hubiera cumplido ni sería tema de debate, se lo tomó un poco más en serio al final pero ya era tarde. Una lástima, quedé con la sensación de que podíamos haber visto algo mucho mejor.

Había que sacrificar a alguien para tomar aire y buscar el momento de cenar, le tocó el turno a Rob Zombie por lo que me perdí la primera mitad de su actuación. Estuvo entretenido, un show muy visual con su parafernalia del terror adornando el escenario, lo mejor fue escuchar alguna canción de White Zombie, como "Super-Charger Heaven" o "More Human Than Human", desde la distancia.

En que forma nos encontraríamos a Ozzy Osbourne era una incógnita. Sí, está mayor, pero no acabado ni mucho menos. El concierto fue de más a menos y parece estudiado para desgastar lo mínimo al Madman, algunos solos de guitarra y batería creo que se podían haber evitado, o al menos recortarlos en duración. Lo cierto es que disfruté mucho teniendo delante por vez primera al cantante original de Black Sabbath, hasta donde yo recuerdo porque a esas alturas de la noche empecé a pagar los excesos que se traducen en borrosas lagunas mentales.

Y llegó el turno de Kyuss Lives! que no Kyuss, cuidado, ni sonaron como tal, por mucho que algunos se empeñen en vendernos "lo más parecido que podamos encontrar a...", bajo mi punto de vista más bien representan la antítesis de lo que fue el espíritu original de aquella banda. Realmente no sabía muy bien que esperar, y claro que me gustaron pero en algún momento desconecté. Todo parecía muy calculado, poco expontáneo, a parte de que en las primeras filas se montaron unos pogos bastante incómodos para los que ya íbamos un poco tocados. "Asteroid", "Gardenia", "Freedom Run", "100º", "Green Machine"... todas muy potentes revisiones, pero la sombra de Josh Homme es alargada y nadie podrá dar el mismo tamiz original a esas canciones. Los tres miembros restantes cumplen su función, algo mecánica, de la mejor forma que pueden. Bien John García, correcto Nick Oliveri, sobresaliente Brant Bjork. Al parecer, los triunfadores del dia para la mayoría. Yo sufrí tal bajón que todavía no me lo explico, cuando acabó el concierto no era persona... El viernes hubo más y mejor.