Decir Wovenhand es referirse obligatoriamente al prolífico músico letrista-compositor David Eugene Edwards, alma máter que lidera esta banda, como también lo hiciera en las pasadas dos décadas al frente de 16 Horsepower. Un tipo singular, sin duda, al que rodea un áurea llena de misticismo, y que tiene la especial habilidad para dejar impreso su sello personal, reconocible a leguas, marca que ha servido de guia e influencia para multitud de bandas en todo el mundo, cuya etiqueta es indefinible por naturaleza.
La música de Wovenhand no puede ser descrita en términos convencionales. Su sonido se mueve por los parámetros oscilantes que van del neo-folk, al post rock, pasando por el rock añejo y las corrientes alternativas, fuera del circuito comercial. Todo cobra sentido bajo el particular prisma de David, que ejerce como fuerza motriz principal, en búsqueda de nuevos terrenos por explorar, de atmósferas oscuras y sugerentes, y de una lucha que se debate constantemente entre lo terrenal, lo divino y lo espiritual.
"Refractory Obdurate" se edita via Deathwish Inc./ Glitterhouse Records y nos muestra a unos Wovenhand explorando sus propias raíces de una manera más fuerte, más rockera de lo habitual en comparación con álbumes anteriores. Sin embargo siguen muy presentes sus señas de indentidad, con canciones llenas de bruma, arraigo tradicional americano, gothic folk humeante, melodías melancólicas y una belleza musical que trasciende más allá de géneros o etiquetas. No voy a desgranar canción por canción, simplemente os dejo con mi favorita sobre un total de diez, el track nº4: "Good Shepherd". Un disco soberbio, magistral, sobresaliente.
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