Cuando semanas atrás se anunció el concierto de Three Seasons para la ciudad de Avilés menuda alegría me llevé, por fin vería a una de las bandas más queridas por esta casa, a la que sigo desde que descubrí con su disco debut "Life´s Road" (2011) -reseña aquí- y a tan solo veinte minutos de trayecto por carretera. Ahora, el motivo de esta nueva gira por nuestro país no es otro que el de presentarnos su segundo trabajo, "Understand The World" (2012), un disco que, a falta de crítica por mi parte, pasó la criba para entrar en el Top "Los mejores discos de Rock" del año pasado. Valoraciones subjetivas al margen, de lo que no hay duda es que ambos tuvieron una buena acogida por parte de prensa y público, muy merecida, o esa impresión tengo yo, aunque luego la respuesta no sea la misma cuando hay que desplazarse y ver refrendado el trabajo de la banda sobre un escenario.
Muy pobre asistencia de público, unas treinta y pocas personas calculo, las que nos dimos cita en el Paseo Malecón sobre las 22:00h de la noche. Y eso que la entrada al concierto daba derecho a una cena "pincheo" de la cual dimos buena cuenta en los minutos previos, gracias al trato hospitalario de los responsables del local. Bien surtida, en abundancia y muy rica, todo sea dicho de paso. Adjetivos que pefectamente podría aplicar de forma parecida a lo que después nos ofrecerían Sartez y compañía. La ración musical incluída en la carta de los suecos era de primerísimo nivel, y a diferencia de su anterior gira en 2012 por nuestra geografía, esta vez añadían un ingrediente importante a tener en cuenta: la presencia de una teclista para dar mucho más sabor al sonido de directo, gran acierto por su parte como presuponíamos al enterarnos de la noticia.
Metidos ya en faena, con el buen humor que da tener el estómago lleno, nos frotábamos las manos cuando a eso de las 22:45h aparecían Three Seasons para servirnos el postre. Una intro dio paso a "Too Many Choices" y un posterior saludo del cantante y guitarrista Sartez Faraj, que nos deseaba las buenas noches, fue la antesala de un apasionante viaje musical en el tiempo. Algo así como cuatro décadas de retroceso, que si bien no vivimos en primera persona, al menos podemos soñar despiertos gracias a grupos que recrean un sentimiento compartido por aquellos que veneramos la escuela de Purple-Sabbath-Uriah Heep... o en otras palabras, la flor y nata por excelencia del hard rock/heavy/progresivo.
Tuvieron un percance a la media hora cuando la pedalera de Sartez dejó de funcionar durante "An Endless Delusion" (mala suerte), con el consiguiente nerviosismo, reparación, y disculpa, mientras la banda le cubría las espaldas improvisando una jam. Pero ni eso empañó una actuación que fue espléndida de principio a fin, con un cuarteto perfectamente cohesionado, alternando temas de "Understand The World" con los de su debut, y haciendo gala de una clase y sonido sobresalientes, incluso mejor de lo que esperábamos en principio por la propia acústica del local. Disfrutamos de pasajes bucólicos, guiños hendrixianos, pinceladas de psicodelia, un órgano Hammond que sonó a gloria, desarrollos progresivos, improvisaciones jazz...
El setlist para caerse de espaldas, no lo siguieron a rajatabla pero casi. Prácticamente la totalidad de su repertorio, reservando lo mejor para el final, como por ejemplo esos dos temazos del "Life´s Road" ("Since Your First Day"/"Each To Their Own") a los que siguió la que cierra el último disco, "Can´t Let Go", con tiempo todavía para unos bises que completarían dos horas de fenomenal concierto. "Cold To The Bone" y "Feel Alive", servidas en bandeja y a gusto de todos los presentes, ¡para salivar y chuparnos los dedos!. Junto con ellas, nos llevamos medio puesto de merchandising, muy buen sabor de boca y un grandísimo recuerdo.
4 comentarios:
Hey Karlam!!! por un error de actualización o falta de la coletilla '.es' en tu dirección de mi blogroll te tenía inactivo desde hace casi un mes y me estabas empezando a mosquear pero veo y compruebo que estás más en forma que nunca y acudiendo a ver bolos acojonantes como este de Three Seasons. Tuvo que ser impresionante y....oye!!! ¿Qué es esa moda de dar un aperitivo a los asistentes?....debería extenderse a todas las salas, ¡seguro que acudiría más gente!! ja,ja!!
Lo del aperitivo también está apuntado para el Rock In Ría, que es en Junio, así que lo acabaré probando.
Lo de la poca asistencia ... ya es lo habitual. ¡Que desgracia!
Al tocar en lunes en Bcn no pude bajar y muy a pesar mio me los perdí. Estos tipos son buenismos.
Un saludo.
PUPILO, estoy al tanto de ese "error" del blogroll. Ni idea de a que se debe... pero sí, lleva más de un mes así. Al parecer tampoco se actualizan las entradas en google reader, y sin embargo el tráfico de visitas sigue yendo a la alza. Curioso que seas el primero en advertirmelo... (Por cierto, 28 entradas en 29 dias: batiendo registros)
Lo del aperitivo fue todo un detallazo, tanto que se pasaron con las provisiones ¡Sobró comida por todas partes! Imaginate como sería que con el concierto empezado seguían sacando más, jaja!. Nosotros también lo comentábamos, que ojalá cunda el ejemplo!!, pero ya ves, ni así se animó la peña, que se le va a hacer...
Larry, el Rock In Ría... eso me suena, algo leí por ahí. Echaré un vistazo y si se tercia, en caso de duda, será un aliciente más para ir.
Perem, pues vaya faena compañero! me sabe mal por ti que tenías ganas de verlos. A ver si para otra ocasión tienes más suerte. Muy buenos, sí señor!!
Un saludo a todos, y muchas gracias por dejaros caer otra vez por aquí.
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